Jesús fue traicionado y abandonado por sus amigos y seguidores. Fue flagelado, coronado con espinas, y en burla aclamado como rey. Fue forzado a cargar su cruz y crucificado. Murió y descendió al infierno. Encomendando su vida al Padre, Jesús cargo con nuestros sufrimientos y dolores, y, obediente hasta la muerte, gano para nosotros la salvación eterna.
Vía Crucis Bilingüe: 3:00 pm
Liturgia en español: 8:00 pm